Aunque tardío, al final parece que se abre paso el otoño y con él se pone fin a una de las estaciones estivales más negras en la historia en cuanto a precipitaciones se refiere. Una vez más el sureste español sufre la escasez de agua y en consecuencia la falta de vida y de recursos. Unos recursos que solo el Trasvase Tajo Segura logra proporcionar.
Y es que el agua es fuente de vida y desarrollo y así lo viven los 1.000 agricultores que forman parte de la Comunidad de Regantes El Saltador, de la zona de Huércal-Overa, quienes después de innumerables dificultades y lograr poner riego a 2.500 hectáreas aplicando las últimas tecnologías en el ahorro y aprovechamiento del agua muestran su modelo de gestión eficiente y ejemplar en el Museo del Agua.
El objetivo de este Centro de Interpretación es dar a conocer la importancia del agua para el ser humano, mostrando su aprovechamiento y uso racional a lo largo de la historia. Bajo el lema “El Agua que da la vida”, los regantes de El Saltador invitan a vecinos, estudiosos o curiosos a conocer su lucha y esfuerzo constante por conseguir esa fuente de vida y desarrollo que es el agua. Para ello, el Museo del Agua ofrece un ameno recorrido con maquetas, paneles, piezas originales y un audiovisual que sin duda nos hará entender cómo se cuida cada gota de agua y cómo los regantes logran sacarle el máximo rendimiento, gracias a la innovación y a la tecnología.
Y sobre todo la visita por el Museo del Agua nos hará ser partícipes de cómo el trabajo y el esfuerzo de los regantes es capaz de transformar un desierto en el primer productor mundial de frutas y hortalizas.