Las escasas precipitaciones, típicas del clima mediterráneo predominante en España, han desarrollado ampliamente políticas de aprovechamiento de los recursos hídricos, tanto superficiales como subterráneos. Esta descompensación, ha sido resuelta mediante la construcción de infraestructuras hidráulicas, como presas, embalses y trasvases.
En la cuenca del Duero, durante la década de los 90, se concluyeron diversas conducciones que enlazan sus principales afluentes como:
- Canal Alto de Payuelos: tiene una longitud de 76 km y trasvasa agua desde el río Esla hasta el Cea. Sus aguas son destinadas principalmente a riego.
- Canal Cea-Campos: tiene una longitud de 49 km y permite transferir 20 m3/s destinados a riego y abastecimiento. El agua puede circular tanto en sentido normal como en contra pendiente, alcanzando la cuenca del Pisuerga, y permitiendo la aportación de recursos al río Valderaduey.
- Aprovechamiento hidroeléctrico de Villarino: situado entre los ríos Tormes y Duero. Permite turbinar caudales desde la presa de Almendra que se vierten al Duero e introducir aportaciones del Duero al embalse de la Almendra, uno de los más grandes de España.
Estas construcciones hidráulicas fueron construidas para abastecer las necesidades de riego principalmente de la comunidad de Castilla y León. Con una capacidad de agua embalsada de 7.520hm3, es una de las cuencas hidrográficas con más volumen.