El 10 de diciembre es una fecha señalada internacionalmente en la que se conmemora la aprobación de la Declaración Universal de los Derechos Humanos.
En el artículo 25, de aquella declaración universal, se enuncia que «Toda persona tiene derecho a un nivel de vida adecuado que le asegure, así como a su familia, la salud y el bienestar, […] y los servicios sociales necesarios».
Si consideramos el nivel de vida, la salud y el bienestar derechos básicos y universales, el agua, debe ser igualmente considerada como elemento básico para el cumplimiento de estos derechos.
Es indudable entonces que todo estado debe promover, mantener y defender un correcto reparto de sus aguas y el abastecimiento necesario para toda su población y España, como país europeo y democrático no puede sino abanderar esta cuestión.
El Levante necesita agua de forma urgente y las administraciones están en la obligación de escucharnos y atender nuestras peticiones pues es un derecho fundamental.